A900
Vacunas y
aplicación de inyecciones


Las siguientes son sugerencias generales para el uso y manejo apropiados de las vacunas:

La prevención de enfermedades resulta mucho más barata que la atención de un veterinario que trate animales con problemas de emergencia.

Es importante que los productores de leche establezcan un programa uniforme de salud del ganado a fin de reducir la cantidad de problemas debidos a enfermedades contagiosas que se presentan en sus manadas. Todas las manadas están propensas a muchas enfermedades de este tipo. Las enfermedades contagiosas pueden ingresar a una manada a través de animales nuevos que se adquieren o pueden ser llevadas a la granja por otros animales o por humanos. Es importante identificar las enfermedades que representan un problema en la manada o en la localidad. Con la ayuda de un veterinario, establezca una estrategia para proteger a la manada de las enfermedades contagiosas y para disminuir su exposición a éstas. Establezca un programa de vacunación por escrito el cual se observe fielmente. Modifique el programa de vacunación según las circunstancias lo justifiquen y la disponibilidad de vacunas cambie. En años recientes se han puesto a la disposición una gran cantidad de vacunas nuevas y de vacunas mixtas. El programa de vacunación es sólo una parte del mantenimiento de una manada saludable. Es recomendable establecer un programa completo de manejo, salubridad, alimentación y atención médica a fin de asegurar una operación próspera y redituable. Véase la página A76 para obtener información sobre la bioseguridad.

Vacunas vivas atenuadas:

Ventajas Desventajas
  • Sólo se requiere una dosis
  • Tienen una reacción inmunológica más rápida
  • Tienen una reacción más fuerte y duradera
  • Se presentan menos reacciones después de aplicarse
  • No se recomiendan para hembras preñadas o para animales que tienen contacto con ellos
  • Existen posibilidades de contagio viral a otros animales
  • Su manejo indebido podría inactivar la vacuna

Vacunas muertas:

Ventajas Desventajas
  • Se recomiendan para hembras preñadas
  • Se mantienen estables al almacenarse
  • Se requieren dosis múltiples
  • La reacción inmunológica es más débil
  • La duración de la reacción inmunológica es más breve
  • Los adjutores pueden causar reacciones
  • Las reacciones de hipersensibilidad son más comunes

Las dos vías más comunes de administración de inyecciones son la intramuscular (IM) y la subcutánea (SQ). Algunas vacunas son administradas vía oral (PO) o vía intranasal (IN). El vacunar o inyectar por la vía indebida puede ocasionar que la inmunización falle y que haya reacciones locales.

 

Intramusculares (IM)

Las vacunas que se administran vía IM son acogidas por el torrente sanguíneo y distribuidas rápidamente a todos los tejidos del cuerpo. Para las inyecciones IM se recomienda una aguja de 1 a 1 ½ pulgadas (2,5 cm a 3,8 cm) de largo y de un diámetro de calibre 16 ó 18. El mejor lugar para colocar las inyecciones es en los músculos pesados del cuello (véase la figura 1). A fin de reducir los daños a las reses, cuando sea posible, evite inyectar en los cuartos posteriores. Resulta mejor no administrar más de 20 mL en un lugar determinado. Para evitar una administración intravenosa (IV) accidental, tire del émbolo a fin de asegurarse de que no haya sangre en la jeringa. Si hay sangre, saque toda la aguja y vuelva a insertarla en un otro lugar.

Figura 1
Área del cuello para inyecciones IM.

 

Subcutáneas (SQ)

Se debe utilizar una aguja de 1 pulgada (2,5 cm) de longitud y de un diámetro de calibre 16 ó 18. Para este tipo de inyecciones, los mejores lugares son la piel suelta del costado del cuello o detrás del codo. Se recomienda la técnica de insertar la aguja con una sola mano a fin de aplicar la inyección (podría resultar necesario recibir capacitación adicional). Las sustancias que se aplican vía SQ no son acogidas por la sangre con la misma rapidez que las IM, no obstante, reducen notablemente los daños a las reses.

Figura 2
Aplicación de una inyección SQ con una sola mano en el área del cuello.

 

Vacunas orales (PO)

Las vacunas orales se emplean para vacunar a los terneros recién nacidos. Primero, levante ligeramente la cabeza del animal y coloque la jeringa que contiene la vacuna en un costado de la boca y en la parte trasera de ésta. Enseguida, descargue el contenido de la jeringa. Por último, sostenga al animal hasta que toda la vacuna haya sido tragada.

 

Intranasales (IN)

Las vacunas intranasales incluyen aplicadores especiales que caben en el extremo de las jeringas. Inmovilice al animal y rocíe el contenido rápidamente en las fosas nasales. Es probable que el animal estornude o tosa, pero ello no reduce la eficacia de la vacuna. Nunca inyecte un producto intranasal en los músculos o en la piel.